La Trehalosa producida por la Selaginella lepidophylla en particular tiene muchos beneficios para la piel y para los humanos, posiblemente en un caso incluso de nivel autofágico.
Lo que las plantas de resurrección hacen muy hábilmente es mantenerse en un estado muy protegido bajo estrés, y tomando las moléculas que producen para protegerse, se ha demostrado varias veces que esas mismas moléculas actúan como muy buenos activos medicinales.
Todas las plantas de resurrección que hemos visto producen mucha sacarosa, pero hay otro poco de azúcar llamado trehalosa que no es producido por todas las plantas de resurrección, sino por algunas.
Las plantas de resurrección tienen secretos que pueden ser utilizados en el futuro para retrasar el envejecimiento.
Jill Farrant
Prof. & Research Chair:
Systems biology studies on Plant Desiccation Tolerance for Food Security
Department of Molecular and Cell Biology
University of Cape Town
South Africa
La Dra. Jill Farrant tiene una trayectoria extraordinaria
Licenciatura, MSc, y PhD en la Universidad de KwaZulu-Natal, Durban, Sudáfrica.
Ganó el Premio NRF President para investigadores que, sobre la base de potencial excepcional demostrado en su trabajo doctoral, son posibles futuros líderes internacionales en su campo.
Ganó la Medalla de Plata SAAB por Excelencia en Botánica.
Es socia de la Royal Society of Southern Africa de la Universidad de Ciudad del Cabo y de Oppenheimer Memorial Trust Foundation.
En 2010 ganó el Premio del Departamento de Ciencia y Tecnología por ser la científica más destacada.
Ha sido presidenta de la Asociación sudafricana de Botánicos (2009–2010).
Premio Harry Oppenheimer Fellowship Award por su investigación en plantas que resucitan.
2012 Premio L'Oréal-UNESCO de Mujeres en la Ciencia.
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